Barcos de guerra españoles
Última actualización el 13 marzo 2024 a las 10:53 am
A la hora de hablar de navegación y barcos de guerra, es imprescindible el tener que brindarle atención a una nación como España. Es impensable no tener en cuenta en la historia de las embarcaciones a un país que fue protagonista de la conquista de América y cuyos galeones y carabelas que cruzaban los océanos debían estar preparados para seguir adelante en medio de los asaltos de los piratas y el cruce del fuego de los cañones que disparaban bolas de acero para sumergirlas en las profundidades de las aguas.
Actualmente, España cuenta con todos los recursos para hacer frente a todas las expediciones marítimas y acompañar a otras naciones en sus conflictos bélicos. El arsenal bélico de sus portaviones, sus cruceros de guerra y sus submarinos, demuestran que poseen una marina española lo suficientemente fuertes para medírsele a las ambiciones de cualquier enemigo.
Atreverse a declararle la guerra a los barcos modernos de España es un asunto que cualquier nación pensaría dos veces en realizar, ya que en estos tiempos, que ya no son los del dictador Franco, la Corona Española y su respectivo Gobierno han invertido un enorme presupuesto para mantenerse al día con sus recursos militares.
Algunos de los barcos de guerra españoles más conocidos son: Fragata Santa María, Fragata Álvaro de Bazán, Patrulleros Clase Toralla, Patrulleros Clase Chireu, B.A.C. Patiño, B.A.C. Cantabria y los anfibios B.A.A Galicia, B.A.A. Castilla y el Grupo Naval de Playa. Además de, por supuesto, el único portaaviones de la armada española tras la baja del Príncipe de Asturias (R-11), que no es otro que el portaaviones Juan Carlos I.
Claves del Artículo
- La Armada Española se encarga de la defensa y protección de los intereses marítimos de España.
- Es heredera de una larga tradición naval que ha influido notablemente en su evolución histórica.
- Compagina su legado histórico con la modernización y la importancia estratégica en el ámbito marítimo global.
Historia y Desarrollo
La Armada Española, con orígenes que se remontan al siglo XV, ha jugado un papel crucial en la historia marítima europea y mundial. Desde su fundación hasta su papel en importantes conflictos bélicos y su famoso desafío en el Canal de la Mancha en 1588, este cuerpo ha sido testigo y protagonista en el desarrollo naval militar.
Fundación y Expansión
La Armada Española se originó en los últimos años del siglo XV con el matrimonio de los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, uniendo de facto dos poderosos reinos. Castilla incorporó la Reconquista y Aragón aportó sus intereses en el Mediterráneo, destacando la presencia naval en lugares como Sicilia y Nápoles.
Durante el reinado de Carlos I y más tarde Felipe II, la armada amplió su alcance a las Américas, Filipinas y el océano Pacífico, gracias a navegantes como Juan Sebastián Elcano y Miguel López de Legazpi, fortaleciendo así el comercio y la dominación española en mares previamente controlados por potencias como Venecia y el Imperio Otomano.
Conflictos y Batallas Importantes
La Armada Española ha estado presente en numerosos enfrentamientos decisivos que han moldeado la historia europea. Confrontación con un creciente poder inglés bajo figuras como Sir Francis Drake, y el papel en la defensa contra los otomanos en la cruenta Batalla de Lepanto en 1571 destaca su capacidad militar. En el siglo XVII, su enfrentamiento en la Guerra de los Ochenta Años con las Provincias Unidas (futura República Holandesa) y la lucha contra corsarios y flotas de países como Francia y la Inglesa mostraron la constante lucha por la supremacía naval ante potencias emergentes.
La Armada Invencible
En 1588, bajo el mando del rey Felipe II, La Gran y Felicísima Armada o La Armada Invencible, se formó para invadir Inglaterra y derrocar a la reina Isabel I, consolidando así el poder español en Europa. Compuesta por 130 embarcaciones como galeones y naves de abastecimiento, partió de Lisboa rumbo al Canal de la Mancha. Contra Pamela por fuerzas lideradas por Charles Howard y con tácticas como el uso de barcos incendiarios en Calais, la batalla final ocurrió cerca de Gravelinas.
Los españoles, afectados por mal clima y una sólida defensa inglesa, se vieron obligados a navegar hacia el norte, rodeando Escocia e Irlanda, sufriendo significativas pérdidas debido a tormentas y naufragios. Este evento marcó un punto de inflexión en el balance naval entre España e Inglaterra.
Estructura y Organización
La Armada Española tiene una estructura compleja que asegura la defensa marítima nacional e internacional. Se divide en varias ramas para las operaciones navales y apoyo de las fuerzas especiales, asegurando una presencia efectiva en el mar.
Operaciones y Fuerzas Especiales
Las operaciones de la Armada implican la utilización de diversos buques, submarinos y unidades de infantería de marina, situados en bases como Rota, Ferrol y Cartagena. Las Fuerzas Especiales incluyen la Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE), con base en Cartagena y especializada en operaciones de inserción directa, inteligencia y lucha contra el terrorismo y la piratería, como en la Operación Atalanta contra la piratería en el Cuerno de África.
Flotillas y Unidades
Las flotillas y las unidades representan el componente táctico y operativo de la Armada. La Flotilla de Submarinos, con unidades como el «Galerna» o el «Tramontana», y la Flotilla de Aeronaves, localizadas en bases como las de Rota y Cartagena, aportan capacidades críticas en términos de vigilancia y ataque bajo el agua y en el aire. Las Fragatas y los Buques de Acción Marítima (BAM) forman la columna vertebral de la presencia naval, con navíos como el «Francis Drake» o el «Juan Carlos I» desplegados en misiones tanto nacionales como afiliadas a la OTAN. Veamos a continuación cuales son los principales buques de la Armada Española.
Portaaviones español Juan Carlos I (L-61)
Aunque puede cumplir las funciones de portaaeronaves que tenía su predecesor, el Príncipe de Asturias, el L-61 es mucho más. Se trata de un buque de proyección estratégica y asalto anfibio. Es decir, este “monstruo” de la armada española es capaz de transportar hasta 1.200 soldados más 247 de la dotación del buque, vehículos blindados ligeros y vehículos pesados, como los conocidos tanques Leopard 2E, para desembarco en tierra.
Además, este buque de proyección estratégica multipropósito es capaz de llevar helicópteros de transporte de los tipos NH90 y los pesados CH-47 Chinook. Cuando actúa como portaviones es capaz de llevar hasta 10 aviones de combate en su dotación. En la actualidad, la armada de España cuenta con los conocidos Harrier de despegue vertical, aunque se especula que se hará con los modernos cazabombarderos F-35 para la dotación de este buque de guerra.
Con este portaaviones, España entra en el selecto grupo de las 10 únicas armadas del mundo que tienen portaaviones actualmente en servicio. Aunque es cierto que tanto Australia como Turquía se harán con portaaviones de construcción española basados en el L-61.
Entre otras características, el Juan Carlos I destaca por:
Característica | Descripción |
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Desplazamiento | 26.000 toneladas |
Eslora | 231 m |
Manga | 32 m |
Propulsión | Sistema de propulsión eléctrico compuesto por una turbina de gas de 19.75 MW y dos generadores diésel de 7.86 MW cada uno, además de dos POD de propulsión de 11 MW cada uno con dos hélices de palas fijas de ø4,5 m |
Dotación | 295 personas, incluyendo 247 de la dotación propia, 103 del Estado Mayor, 890 del Personal Fuerza de Desembarco, 23 del Grupo Naval de Playa, y 172 de la Dotación Unidades Aéreas Embarcadas |
Armamento | 4 ametralladoras Browning de 12,7 mm y se prevé la instalación de un Sistema Antimisil de Defensa de Punto en el futuro |
Autonomía | 9.000 millas a 15 nudos |
Velocidad máxima | 19,5 nudos en operaciones anfibias y 21 nudos en operaciones aéreas |
Junto a todo esto, no hay que pasar por alto el moderno e impresionante sistema de sensores que posee. Así, posee un potentísimo sistema de radar junto al conocido sistema de combate AEGIS, que también opera en las fragatas clase F-100. Es, por tanto, un barco de guerra logístico que permite a España dotar de proyección estratégica a sus fuerzas armadas, ya que sumando el L-61 a los Buques de Asalto Anfibio Clase Galicia y las fragatas de combarte Clase Álvaro de Bazán y Clase Santa María más los submarinos, obtenemos un grupo de combate muy a tener en cuenta.
Buques de asalto anfibio clase Galicia, el L-52 Castilla
He aquí una descripción detallada del Buque de Asalto Anfibio Castilla, cuyas características te darán una idea estándar del poder bélico que ostenta el país español:
Característica | Descripción |
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Eslora | 165 mts |
Manga | 25 mts |
Propulsión | 2 hélices de paso variable de 5 palas y 4 m de diámetro, 1 hélice empujadora de proa de 1.500 CV (empuje transversal) |
Planta eléctrica | 7 MW, con 4 generadores diésel de 1.520 Kw y uno de emergencia de 715 Kw |
Cubierta de vuelo | 1.340 m2 con 2 puntos de toma |
Armamento | 2 Ametralladoras OERLIKON 20mm, 4 ametralladoras Browning 12,7 mm, 3 ametralladoras MG 7,62mm, 6 Lanzachaff para defensa antimisil |
Sensores | Radar de exploración aérea 3D, radar de superficie y navegación (banda I), radar de control de helicópteros (banda F), radar de navegación LPI (baja probabilidad de intercepción) |
Capacidades hospitalarias | Hospital con 2 quirófanos y UCI de 8 camas, laboratorio, sala de esterilización y otros gabinetes de tecnología avanzada |
Tripulación | 195 personas, con capacidad para alojar hasta 767 personas |
Se trata, por tanto, de un barco de guerra especialmente preparado para la guerra electrónica y el empleo de funciones de buque de mando y control. Con todo, no hay que perder su principal funcionalidad como buque de asalto anfibio, por lo que puede transportar hasta 33 tanques tipo Leopard 2E o 170 blindados ligeros. Además de helicópteros y lanchas de desembarco anfibio, como las pesadas LCM-1E.
Sus capacidades, sumadas a las del Juan Carlos I, otorgan a la marina española una capacidad de proyección estrategia de las mayores del mundo.
Fragatas AEGIS Españolas Álvaro de Bazán (F-101)
Otro de estos monstruos titánicos de las aguas son las fragatas clase Álvaro de Bazán, conocidas con el nombre de AEGIS F-100. Su nombre evoca a uno de los almirantes más famosos de la historia de la armada de este país.
Está acreditado de acuerdo a medios de Estados Unidos como un autentico destructor, gracias a todo su arsenal de dotación, el cual consiste en: torpedos, misiles superficie-aire, misiles superficie-aire, ametralladoras, cañones de 20 mm, cañones de 25 mm, entre otros, sistema de lanzamiento vertical y misiles antibuque RGM-84 Sub-Harpoon block II.
La marina española conoce a fondo el potencial de estas fragatas y la ferocidad que representarán en caso de verse involucrado en una batalla contra cualquier otra nación.
Es clave que las fragatas F-100 pueden combatir en igualdad de condiciones con los barcos de guerra americanos y son los primeros buques europeos con el sistema de combate AEGIS, el cual en el rastreo de misiles y blancos enemigos para guiar los misiles propios hacia la destrucción de dichos objetivos. Los buques de guerra clase Álvaro de Bazán pueden monitorear hasta 90 blancos al mismo tiempo.
Los buques están preparados para participar el programa de defensa antimisiles de EEUU, aunque la adaptación necesaria aún no se ha realizado por las dificultades presupuestarias que atraviesa la armada española.
Sus características son:
Característica | Descripción |
---|---|
Eslora | 146,72 m |
Manga | 18,6 m |
Calado | 4,75 m |
Potencia a gas | 46 648 CV |
Diésel | 12 000 CV |
Velocidad | 28,5 nudos |
Tripulación | 216 personas |
Aeronaves | 1 Seahawk SH-60B Lamps III |
Equipamiento de las aeronaves | Plataforma para apontaje a popa, Hangar para 1 helicóptero |
Submarinos Españoles Clase Galerna, el Tramontana (S-74)
Finalmente, para cerrar adecuadamente este ciclo de presentación de los barcos de guerra modernos con los que actualmente cuenta España, sería adecuado describir uno de sus submarinos. En este caso prestaremos nuestra atención al submarino Tramontana (S-74), que fue botado al agua allá el 30 de noviembre del año 1984. Aun se encuentra activo y de hecho este buque participó en el rodaje de la cinta Navy Seals, obra protagonizada por Charile Sheen y dirigida por Lewis Teague.
Sus características son:
Característica | Descripción |
---|---|
Eslora | 67,57 metros |
Manga | 6,8 metros |
Calado | 5,4 metros |
Armamento | 4 tubos lanzatorpedos de 550 mm, 20 torpedos (tipos F-17, F-17 MODII, E-18, L-5), 19 minas, capacidad reducida a 7 torpedos |
Sensores | Radar: Thomson-CSF DRUA 33C (banda I), Sónar: Thales DUUX 5, Thales DSUV 22 |
Velocidad | 12 nudos en superficie |
Tripulación | 60 personas |
Importancia Estratégica y Modernización
La Armada Española, a través de su historia y modernización, ha jugado un papel crucial en la proyección estratégica y operativa del poder naval de España. La incorporación de tecnologías avanzadas y la participación en misiones internacionales respaldan su relevancia actual.
Bases Navales y Expansión Global
Las bases navales son fundamentales para la proyección de la Armada Española. Destacan las bases de Rota y Ferrol, contribuyendo a la expansión global y operatividad de la flota. Rota, además, sirve como punto estratégico para operaciones de la OTAN y como enclave para la Infantería de Marina en su despliegue. La base de Ferrol desempeña un papel importante en los procesos de modernización y mantenimiento de los buques.
- BAC Cantabria: Es un buque de aprovisionamiento de combate que ofrece soporte logístico a las fuerzas navales en la mar.
- Flota de Submarinos: Incluye a los submarinos con tecnología avanzada que proporcionan capacidades estratégicas en el ámbito subacuático.
Participación en Conflictos Contemporáneos
La Armada Española mantiene una presencia activa en varios conflictos contemporáneos. Resalta su participación en la Operación Atalanta, centrada en la protección de las rutas marítimas frente a la piratería en el Cuerno de África. Además, las fuerzas especiales de la Armada, junto con la Escuadrilla de Escoltas y los Buques de Acción Marítima (BAM), desempeñan roles cruciales en operaciones especiales y de seguridad marítima.
- Escuadrilla de Escoltas: Compuesta por fragatas modernas, es el núcleo de la flota de superficie y desempeña operaciones de escolta y protección.
- Operaciones Especiales: Incluyen tareas de inteligencia, reconocimiento, y otras misiones cruciales llevadas a cabo por unidades altamente entrenadas.
La modernización y la estrategia de la Armada Española continúa evolucionando para adaptarse a los desafíos contemporáneos y mantener su relevancia en el tablero internacional.
Últimas adquisiciones de Barcos de Guerra Españoles
Aunque con estos mimbres ya podríamos decir que España cuenta con una de las armadas más poderosas del mundo, lo cierto es que el país europeo está a la espera de dos nuevas y potentes adquisiciones para el futuro. Se trata de una evolución de las ya modernas fragatas F-100, las F-110 y de los punteros submarinos diésel S-80.
FRAGATAS F-110
Las fragatas de la clase F-110, también conocidas como Clase Bonifaz, son un proyecto avanzado destinado a reemplazar a los buques de la clase Santa María a partir de 2025. Este proyecto, aprobado por el Gobierno de España en 2019, se centra en la construcción de cinco unidades con un enfoque en defensa antisubmarina, aunque mantienen un carácter multipropósito. La construcción de la primera unidad, la Bonifaz (F-111), comenzó en abril de 2022, esperando su botadura alrededor de 2025 o 2026 y su activación para el 2028.
La Armada planea reforzar su capacidad con al menos dos fragatas F-110 adicionales, especializadas en defensa antiaérea y antimisil, lo que elevaría el total a doce unidades para mediados de la próxima década. Este plan busca mantener capacidades de disuasión efectivas ante cualquier amenaza, potenciando la versatilidad y el poder naval de España. La especialización de las unidades adicionales aún está en definición, pero se contempla la posibilidad de integrar un lanzador vertical en proa con mayor número de celdas y una versión evolucionada del radar SPY-7.
SUBMARINOS S-80
La Armada Española está en proceso de modernizar su flota submarina con la clase S-80, marcando un hito tecnológico en la industria de defensa nacional. El S-81 «Isaac Peral» ya ha sido entregado, siendo el primero de cuatro submarinos que se completarán para finales de 2028.
Este programa eleva a España entre los pocos países capaces de diseñar y construir submarinos convencionales avanzados. Los S-80 destacan por su sistema de propulsión independiente del aire (AIP), que les permite permanecer sumergidos durante semanas, ampliando significativamente su sigilo y autonomía.
Aunque el S-81 aún no incorpora el AIP, el S-83 «Cosme García» será el primer modelo en incluirlo desde su entrega, con los submarinos anteriores programados para actualizarse posteriormente.
Equipados con armamento avanzado como torpedos filoguiados y misiles antibuque, estos submarinos representan un salto cualitativo para la Armada Española, mejorando su capacidad ofensiva y defensiva bajo el agua. Este proyecto refleja el compromiso de España con la innovación en su defensa naval y su posición como líder en tecnología submarina
Polémica sobre el portaaviones español R21, conocido como Carlos III
El futuro portaaviones español R21es un tema que ha generado expectativas y discusiones sobre la modernización de la flota naval española. Originalmente, el proyecto del portaaviones también llamado Carlos III fue concebido para ser uno de los buques más grandes y avanzados de Europa, diseñado para albergar hasta 35 aviones.
Sin embargo, debido a la crisis financiera que afectó a España en 2008, el proyecto no se materializó. A pesar de esto, el diseño y desarrollo del Carlos III han servido como base para futuros proyectos navales en España, mostrando la capacidad tecnológica del país
La controversia en torno a este buque parece que se originó en gran parte de un artículo publicado como una broma el 28 de diciembre de 2019, coincidiendo con el Día de los Santos Inocentes en España. Este artículo, que apareció en Foro Naval, incluso mencionaba de forma humorística la construcción de una base subterránea para alienígenas en la Antártida, comparándola con la duración de la construcción del portaaviones, sugiriendo de manera jocosa que el proyecto se estaba alargando más que la Sagrada Familia de Barcelona.
A pesar de ser una broma, muchos otros bogs y medios se hicieron eco de la noticia, dándola por válida, y desde ese momento la discusión sobre el futuro portaaviones español puede haber sido malinterpretada o exagerada en algunos círculos.
En cuanto a la discusión seria sobre un futuro portaaviones para la Armada Española, se ha especulado sobre varias opciones. Una de ellas sería el desarrollo de un buque similar al LHD Juan Carlos I pero adaptado para aumentar sus capacidades aéreas a costa de sus capacidades anfibias.
Otra opción sería la creación de un portaaviones ligero de entre 20.000 a 25.000 toneladas adaptado al F-35B, lo cual representaría un diseño específicamente enfocado en funciones aeronáuticas. Sin embargo, esta última opción sería la más costosa y resultaría en un buque con un único rol, reduciendo su flexibilidad en el empleo.
Si quieres conocer más, la Armada Española te abre las puertas a muchos de sus secretos en: http://www.armada.mde.es/
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